La ansiedad es uno de los grandes males de la vida moderna, junto con el estrés y la depresión, luchamos contra ella porque queremos sentirnos mejor, disfrutar la vida y sentirnos más felices.
La ansiedad es una respuesta normal al estrés, la preocupación o los temas que nos asustan o amenazan, pero cuando es muy intensa, de larga duración o desproporcionada a la circunstancia, se denomina trastorno de ansiedad.
En esta nota, abordaremos los enfoques de terapia que buscan ayudar a quienes sufren el trastorno.
Además de consultar con un especialista psicólogo que abordará las distintas condiciones externas y personales que están influyendo en el estado de ansiedad del paciente, muchos toman como abordaje complementario el apoyo de algunos enfoques alternativos.
Tratamientos
Existen numerosos tratamientos para controlar los trastornos de ansiedad de forma efectiva y, en todas las etapas, es importante el apoyo personal de los familiares y amigos.
Hemos elaborado una lista con las principales terapias alternativas que pueden reducir los síntomas de la ansiedad y complementar el tratamiento farmacológico y el tratamiento psicológico. Pero lo más importante, es comprender que todo tipo de terapia siempre debe ser acompañada de un apoyo y opinión profesional de tratamiento psicológico, quien guiará de la mejor forma posible para obtener los resultados de sanidad que anhelamos.
¡Vamos a conocer un poco sobre cada terapia alternativa!
Aromaterapia. Los aceites esenciales, los aromas de las diferentes plantas son efectivos para tratar trastornos como la ansiedad. Sándalo, naranjo y lavanda van a ser tus mejores aliados para calmar tus nervios, debes saber que, el primero en hablar de aromaterapia fue el químico francés René Maurice Gattefosse, tras observar que los aceites esenciales contenían poderosas propiedades antisépticas y curativas. Pocos años después publicó su primer libro, en el que afirmaba que inhalar ciertos olores puede aliviar enfermedades como la depresión o la ansiedad.
Las esencias tienen propiedades antisépticas y antiparasitarias, un alto poder cicatrizante y estimulan la regeneración celular. Además, pueden usarse para relajarse, recuperar energías, levantar el estado de ánimo y restablecer el equilibrio interno. La aromaterapia actúa sobre los planos sutiles, por ello puede ser utilizada como terapia de vibraciones; también ayuda a la meditación, a la concentración y a todas aquellas técnicas destinadas a buscar el equilibrio y la armonía.
Flores de Bach. Recurrimos a la naturaleza, en este caso a las flores, para crear elixires relajantes a base de las flores de Bach. Edward Bach fue un médico inglés que investigó entre los años 1928 y 1936 las propiedades de 38 flores de la campiña inglesa aplicables a distintos problemas emocionales. Desde entonces son conocidas como las flores de Bach.
Esta terapia floral parte de la idea de que los desequilibrios emocionales son el origen de la enfermedades físicas y mentales, por lo que “promueve un método de tratamiento capaz de armonizarlos; disminuye la intensidad de padecimientos del ánimo, como el odio, y desarrolla la cualidad opuesta, por ejemplo, la tolerancia”, explica Susana Veilati, presidenta de la Asociación de Terapia Floral Integrativa (AFTI).
Veilati afirma que los remedios florales son compatibles y no sustituyen a otros tratamientos. Además, no tienen contraindicaciones, no hay riesgo de sobredosis, no inducen trastornos secundarios y no conllevan adicción. “Se benefician de ellos adultos, mujeres embarazadas, recién nacidos, niños, animales y plantas”, argumenta.
Fitoterapia. Seguimos con las plantas, utilizando su poder curativo por medio de la fitoterapia. Para la ansiedad, no debe faltar en tu casa Hierba de San Juan. Las más utilizadas en el tratamiento de la ansiedad son: Manzanilla, Caléndula, Ginkgo Biloba, Valeriana, Melisa, Agripalma, Lavanda, Tila o tilo.
Homeopatía. La homeopatía no es tanto una terapia como una auténtica medicina alternativa. También utiliza el poder curativo de las plantas condensado para combatir la ansiedad con escasos efectos secundarios. Para conseguir los mejores resultados, los medicamentos homeopáticos deben ser prescritos por un médico con la formación adecuada que realizará un diagnóstico preciso. Sin embargo, los cuadros de ataque de pánico y ansiedad tienden a tratarse con diversos tratamientos.
Risoterapia. La risa es el secreto de una buena calidad de vida. La risoterapia es válida para tratar los trastornos psicológicos, pero también cualquier otra enfermedad. Si lo pruebas, lo repetirás.
Reflexoterapia. Esta técnica que contiene toda la sabiduría oriental relaja y combate la ansiedad masajeando o presionando los puntos reflejos, localizados en el pie, que conectan directamente con el cerebro.
Acupuntura. Con los mismos principios que la reflexoterapia, la acupuntura se realiza introduciendo agujas en la mano y en el antebrazo para combatir directamente la ansiedad.
Reiki. Mediante la imposición de manos, el flujo de energía desbloquea permitiéndote lograr el estado de relajación que necesitas para tus nervios.
Yoga. Una disciplina que promueve el equilibrio entre cuerpo y mente, ideal para los trastornos de ansiedad porque te enseña a respirar y a mantener un estado relajado.
Masajes. Un buen masaje, realizado por un especialista, es una de las técnicas más efectivas para combatir la ansiedad por la sensación de bienestar y equilibrio que produce.
No te desanimes, siempre hay una solución, busca apoyo profesional.